Deseo recordarte que ese impulso que proviene de tu interior, que te empuja a hacer algo con lo que verdaderamente vibras, es real. No es producto de tu imaginación. Y te seguirá empujando hasta que te dejes llevar por esa corriente y manifiestes tu misión.

Cuando vibras con algo, creas cosas que salen del Alma. Cuando manifiestas lo que sale del Alma, cumples con tu misión en la Tierra.

Los talleres de meditación me han regalado la gran oportunidad de realmente conocer muchas Almas. A través de la visión interna (que como siempre digo, todos tenemos) he podido ver el verdadero Ser que habita dentro de cada cuerpo, observar lo que es invisible para los ojos físicos; lo grande, ilimitada y majestuosa que es cada Alma. Cuando esto sucede, me quito el sombrero y me arrodillo ante estas, recordando que no hay seres superiores o inferiores. Siento la tranquilidad de saber que cada persona cuenta con su propio maestro en su interior, donde habitan todas las respuestas a lo que siempre se ha cuestionado. No hay necesidad de buscar en el exterior a ningún maestro.

Tu Alma ha encarnado durante miles de vidas, no solamente en este planeta, sino en diferentes lugares del Universo, y en cada vida ha almacenado una gran cantidad de sabiduría. Es cuando compartes este conocimiento adquirido, que comienzas a cumplir tu misión. Ésta puede estar relacionada con el arte, la ciencia, la cultura, el medio ambiente, la tecnología, las emociones, la mente, la energía, la espiritualidad, en fin… sólo tú sabe realmente a qué dedicarías tus días así no recibieras una remuneración económica. Sólo tú sabes qué haces mejor que nadie porque de verdad te apasiona.

Mi consejo: no te preocupes por el cómo. Cuando estés decidido a cumplir tu misión, todo el Universo conspirará para que lo logres. El dinero, el lugar, las personas y los demás elementos necesarios se manifestarán en tu vida. Pero sólo lo harán si decides cumplir tu verdadero propósito de vida, porque cuando vas por un camino que no está en sintonía con tu Alma, la vida misma te mostrará de diferentes maneras que por ahí no es.

Tu misión no es algo necesariamente individual, sino complementario con la misión de otras Almas. Estamos trabajando en equipo con un mismo objetivo: ganar comprensión y sabiduría para aumentar nuestro nivel de conciencia, y de esta manera crear una sociedad más sabia.

Hoy quiero compartir contigo un sencillo ejercicio… sólo si estás decidido a dar el primer paso (y el más importante) hacia la manifestación de tu misión.

Meditación: Manifestando la misión de tu Alma

1. Toma una libreta de notas en blanco. De ahora en adelante se convertirá en tu Diario del Alma; podrás utilizarlo solamente para escribir historias, reflexiones, meditaciones, sueños y pensamientos profundos.
2. Prepárate tu fruta favorita. Te la podrás comer una vez empieces a escribir la primera entrada en tu nuevo diario. Esta fruta simboliza el planeta Tierra, el cual existe para proveerte de todo lo que necesitas para cumplir tu misión. También representa lo mucho que vas a disfrutar cada paso del camino hacia tu verdadero propósito de vida.
3. Busca un lugar tranquilo y siéntate cómodamente.
4. Cierra tus ojos y siente por unos minutos tu respiración.
5. Concéntrate en sentir tu corazón mientras relajas de manera consciente cada uno de los músculos de tu cuerpo.
6. Abre tus ojos y comienza a escribir lo que tu corazón (no tu mente) siente que quiere hacer con tu vida en este nuevo año. Es algo que nada tiene que ver con ganarse la aprobación de la sociedad, algo que no viene del ego sino del Alma.
7. Tu misión es como un castillo. Para construirlo, debes comenzar con el primer ladrillo. Analiza y escribe cuál sería ese primer paso (entre más simple y alcanzable, mejor).
8. Una vez pongas el primer ladrillo, enfócate en el siguiente, y luego en el siguiente. Es importante no perder de vista la construcción del castillo por estar soñando con el resultado.

Con disciplina, pasión y perseverancia lograrás manifestar lo que hoy se siente tan lejano. Verás que la realización de tu misión no era una fantasía, ni algo que le ocurre sólo a ciertas personas. Siempre ha sido una posibilidad y apenas des el primer paso, empezará a ser una realidad.

Demasiados sueñan, muchos buscan, algunos sienten, pero pocos se arriesgan a cumplir su misión.

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